El Ministerio de Salud y Población de Egipto ha tomado medidas preventivas ante la propagación de una misteriosa enfermedad que ha afectado a al menos 250 personas en la ciudad de Al-Aleqat. Los contagios presentan síntomas comunes como fiebre, fatiga, dolor de huesos, cabeza y estómago, pero aún no se ha logrado determinar exactamente qué afección es. Aunque los casos han sido leves y moderados, se desconoce la causa y naturaleza de la enfermedad, lo que ha llevado a las autoridades a tomar acciones rápidas para controlarla.
La falta de un patrón uniforme en los síntomas ha dificultado la identificación de la enfermedad. Sin embargo, Nahla Abdel-Wahhab, jefa del Departamento de Bacteriología del Hospital Universitario de El Cairo, sugiere que podría tratarse de la «fiebre del dengue», transmitida por mosquitos, lo que ha llevado a las autoridades a implementar medidas de control, incluyendo el rociado de plaguicidas y la toma de muestras de sangre de los pacientes y del entorno para su análisis.
El antiguo Egipto también enfrentó diversas enfermedades, como la esquistosomiasis, tracoma, malaria y disentería, muchas de las cuales estaban relacionadas con el agua contaminada y las picaduras de mosquitos. Aunque la fiebre del dengue no era común en la región, ha habido casos anteriores registrados en el país. La preocupación de las autoridades de salud es comprensible, dado que estas enfermedades pueden propagarse rápidamente, y es esencial tomar medidas preventivas y de control para proteger la salud de la población.
